Saltar al contenido

¿Por qué ser alto te puede poner las cosas más fáciles para ser portero?

Un portero alto o un portero gordo, la solución popular para cualquier pachanga que se precie.

Seguramente lo habrás podido ver en el patio de colegio o en el partido de amigos, la elección de portero casi siempre es parecida.

La lógica nos dice que un portero alto o gordo tapa más portería.

Sin embargo, eso no debería ser del todo así, aunque parece que el fútbol de élite también ha asumido esa máxima.

He de aclarar, que eso ocurre sobre todo en el caso de los altos, los futbolistas gordos ya son anomalias en el fútbol actual.

¿Por qué preferimos al portero alto?

Realmente la altura es solo la punta de lanza de lo que se busca en un portero de élite.

El guardameta ideal es un portento físico.

En este punto sí que podemos hablar de que tapará mejor la portería, pero lo hará gracias a sus cualidades en plural.

Desde el fútbol base se intenta encontrar al portero perfecto y este siempre ha estado relacionado con una altura potencial alta.

Como ocurre en la NBA con los jugadores exteriores, que cada vez se intentan que sean físicamente más potentes (y altos), en el fútbol ocurre lo mismo.

No pasa solo en la demarcación de portero, pero sí que es la que más tiempo lleva buscando un prototipo de jugador así.

La obsesión por la altura es evidente entre los ojeadores.

En las grandes canteras podemos observar ese hecho con guardametas de tamaño muy superior a sus compañeros (algo que cada vez se ve más en los delanteros también).

La altura es el futuro (y deberías saberlo)

No es necesario medir 1.90 para ser portero, pero como exponía antes con el caso de la NBA donde el futuro va hacia los superhombres, parece que el camino del fútbol es similar.

Por ese motivo, y preveniendo que el juego aéreo será una herramienta clave para todo futbolista, el portero debe dominar las alturas.

Los futbolistas cada vez son más fuertes físicamente y el portero debe ser el más fuerte entre los fuertes.

De hecho, la foto del artículo es bastante representativa: Gianluigi Donnarumma (el portero del futuro) al lado de una estrella de la NBA, Danilo Gallinari, y la diferencia de altura es mínima. 196 cm del portero del AC Milan por 208 cm del alero NBA.

Buffon, el molde en el que fijarse

Gianluigi Buffon marca el camino para porteros como Thibaut Courtois, David De Gea o Gianluigi Donnarumma.

El meta italiano es un meta clásico, pero sirve como referencia física para el meta del presente y del futuro.

Buffon posee todo lo que el portero necesita a nivel físico: altura, coordinación y flexibilidad.

La altura no es lo único, ¿qué más necesito para ser un portero físicamente preparado?

El tema físico es vital para un guardameta, pero no todo es cuestión de genética.

Los porteros actuales tiene un trabajo físico espectacular.

Javier Falagán, exportero de Primera División, nos habló en Masliga de lo que necesitaba un guardameta de élite.

Javier Falagán (entrenador de porteros del Coruxo, exguardameta del Compostela en Primera División)
Javier Falagán (entrenador de porteros del Coruxo, exguardameta del Compostela en Primera División)

Él destacaba 5 condiciones físicas a tener en cuenta y que podéis ver en el gráfico siguiente:

Las cualidades que destacó Falagán para Masliga
Las cualidades que destacó Falagán para Masliga

Falagán señalaba la importancia de la altura, pero con comillas ya que otras cualidades podían ser igual o más importantes.

Os dejo el enlace al ARTÍCULAZO:  Las cualidades físicas más importantes del portero de élite, de Javier Falagán

En el podréis ver más detalladamente lo que necesita un buen portero a nivel físico.

Ser alto está bien, pero se puede triunfar siendo bajo

¿Entonces si mido menos de 1.80 mejor lo dejó, no?

¡No!

Si algo nos ha enseñado la historia es que hay porteros bajos que también pueden destacar.

Iker Casillas lo nombra Javier Falagán como el referente, pero hay muchos otros.

Keylor Navas apenas llega al 1.80.

Jorge Campos medía 1.70 y no dejaba a nadie indiferente.

René Higuita estaba en 1.75 y seguro que todo el mundo sabe quién es.

Fillol rascaba el 1.80 y tantos otros…

El físico no lo es todo en el fútbol, la técnica y sobre todo la cabeza tienen mucho que ver, pero eso lo trataremos en otro artículo ^^

Charla con Jon Pascua sobre la importancia del físico en los porteros

Para quien no conozca a Jon Pascua comenzaremos diciendo que es el actual entrenador de porteros del Real Betis Balompié, pero es mucho más que eso.

Jon Pascua (entrenador de porteros de Real Betis)
Jon Pascua (entrenador de porteros de Real Betis Balompié)

Aventurero como pocos, el técnico vasco antes de llegar al Betis este 2017 ha estado entrenando entre otros en la escuela de porteros y en el filial del Athletic antes de irse a lugares más exóticos como Sudáfrica (Mamelodi Sundows, de la Premier League Sudafricana, donde conquistó una liga y una copa) o en Filipinas, donde fue el entrenador de porteros de la selección.

¡Mira la página web de JON PASCUA!

Una vez presentado vayamos al meollo de la cuestión y qué sea nuestro invitado quien nos destape las realidades del portero físico.

¿Hay razones para preferir a un portero alto?

No es algo nuevo. Desde siempre, la demarcación del portero ha estado muy relacionada con la envergadura. La posibilidad de cubrir mejor la portería además de la posibilidad de ser más solvente en el juego aéreo son la razón. Totalmente lógico. Además de que la presencia en esa demarcación es algo que gusta y que considero tiene un impacto psicológico real en la forma de ver valorar a un portero, tanto por los jugadores, como por los entrenadores y espectadores. Sin embargo, con la normativa de la cesión y la moda del juego de posesión, esto esta cambiando. Se busca un portero con un mayor equilibrio en todas sus facetas del juego. Los porteros muy altos y con gran envergadura tienen más dificultades para maniobrar con balón, con lo que, quizás, ya no se valore tanto la envergadura porque se observa también al portero desde su aportación ofensiva.

¿Se busca ahora que el portero sea un jugador de campo más?

Se busca un portero que sea eficaz en el juego defensivo, a la vez que dé soluciones en las transiciones defensa-ataque y en el inicio del juego ofensivo combinativo. Un portero que te dé la posibilidad de tener superioridad numérica en el juego. El juego combativo tiende a provocar que la presión salte hacia el portero para después, éste,  combinar y buscar ese hombre libre para superar lineas. Es más; si esto no sucede, estamos viendo también como porteros avanzan en posesión del balón para desde posiciones adelantadas obligando al equipo rival a saltar a la presión para forzar la búsqueda de ese hombre libre. Para hacer todo esto necesitas un portero con una gran comprensión del juego combinativo, un buen manejo de balón y una gran capacidad para aguantar el estrés que este tipo de situaciones provocan al ser el último hombre. Quizás estoy hablando desde mi punto de vista, que evidentemente es claro. Primero por mi filosofía y luego, sin duda alguna, por la del cuerpo técnico con el cual estoy trabajando.

¿Se entrena más la coordinación ahora con ese prototipo de portero-jugador de nuestros días?

No sé la metodología de entrenamiento que emplean otros entrenadores de porteros, pero considero que es importante hacerlo. Y cuando hablo de coordinación me refiero a tener una buena técnica de carrera, una buena movilidad y una buena maniobra, una gran frecuencia de pasos que te ayuden a perfilarte siembre correctamente para controlar el balón y el espacio de forma correcta, o incluso para cambiar las carreras hacia el balón con objeto de orientar mejor los pases para superar líneas. Hay que trabajar todo en conjunto, porque todas estas herramientas ayudan a que los pases sean mejores al ser también mejores los controles. Y luego, claro, todo esto hay que integrarlo con los jugadores de campo. Yo lo llamo pensamiento colectivo. Para asociarse todos tienen que ver esa jugada y ese tercer hombre. Por eso son importantes los mecanismos. El tener un portero con un buen manejo de balón con los pies no te garantiza nada si el equipo no ayuda y da soluciones. La calidad técnica está al servicio de la inteligencia táctica.

¿Hacia qué tipo de portero vamos?

Pienso que la tendencia va hacia porteros del perfil de Marc André ter Stegen, Bravo etc… jugadores muy completos que tienen un gran equilibrio y solvencia en todas las facetas del juego. Pero claro, esto depende también de las características del juego del equipo y sus necesidades. Equipos de perfil defensivo buscarán un portero acorde a sus características si no tienen la idea de salir jugando desde atrás. No obstante, viendo la evolución que está sufriendo el fútbol en este aspecto, cada vez se da más importancia al juego con los pies del portero. Algo que por otro lado es apasionante porque nos obliga a evolucionar y a crecer. Sin embargo, también hay equipos que no den tanta importancia al juego combinativo y se decantan por porteros con virtudes defensivas. Pero cuando hablamos de construir, desde la base, yo creo que todos buscamos un portero del perfil del cual estoy hablando. Esta nueva tendencia hace que la demarcación del portero sea cada más más valorada por los entrenadores. El portero actual tiene más responsabilidades que el de antes, y eso es algo que nos hace ser mas valorados e importantes.

Con Jon Pascua acabamos este artículo sobre la importancia del portero alto y la importancia del físico en dicha demarcación. Si te ha gustado compártelo con tus conocidos y si quieres tener más noticias de suscríbete y cada 15 días te enviaré un e-mail con las novedades de Instituto Fútbol.

Mientras tanto sigue chafardeando la web, que seguro que encuentras algo que te guste 🙂

Artículo de referencia

Autor

Iñaki García
Soy Iñaki García y soy periodista. Sé muy poco de fútbol, de hecho, he jugado a baloncesto media vida pese a medir 1.70. Sin embargo, en cuanto se trata de escribir este es mi deporte.
error: Content is protected !!